domingo, 28 de febrero de 2010

Noriko's Dinner Table (Japón, 2005)

Battosai

Dos chicas se escapan de casa y acaban trabajando en una empresa que proporciona familias de alquiler, a la vez que una ola de suicidios asola Tokio.

La película tiene relación con Suicide Club (la cual conviene ver antes, por cierto, aunque no es imprescindible), y esta vez Sono es más coherente que allí, dentro de la ida de pinza que es este filme. Al menos en este caso es una ida de pinza creíble (si alguien entiende la otra, que me la explique).

A pesar del comportamiento inverosímil de algunos personajes en ciertos momentos, las más de dos horas y media que dura se pasan volando y son una delicia si decides dejarte llevar.

En la forma de contar la historia se parece en cierta medida a lo que luego haría con Love Exposure, película posterior en la que todo lo (mucho) bueno que hay aquí se encuentra amplificado.

Un 7.


Ulises

Noriko Shimabara, una adolescente de 17 años en plena crisis existencial y aburrida de su vida en un pequeño pueblo, decide escaparse de casa e irse a Tokyo en busca de una conocida de un foro..
Kumiko, administradora de un foro de chicas con problemas y encargada de una agencia de "familias de alquiler", recibe en Tokyo la visita de una de las miembras de su web..
Yuka Shimabara, cuya hermana mayor meses antes decidió escaparse de casa, decide seguir su ejemplo e irse a Tokyo..
Tetsuzo Shimabara, cuyas hijas se le han escapado de casa y ante el suicidio de su mujer, decide irse a Tokyo en busca de sus vástagas..
Tokyo vive una epidemia de suicidios..

Sion Sono consiguió la fama nacional e internacional con Suicide Club, película de la que ésta es su secuela, que no 2ª parte, ya que se desarrolla en el mismo espacio temporal que la anterior, y aunque mantiene su gusto por lo excabroso, lo violento y lo sangriento, aquí se centra en una visión radical tanto de la figura del adolescente "disfuncional" como de exponer de forma cruel los roles y pobreza de las estructuras familiares. En este filme también estrenaría una puesta en escena entre lo barroco y lo psicodélico que mas tarde acentuaría todavia más en la excepcional Strange Circus.
Posiblemente la primera obra maestra de un director de un talento impresionante, aunque dado a veces a dejarse llevar por su gusto por el desvarío. Nadie es perfecto
.

1 comentario:

scb dijo...

Hace unos días ví Love exposure y la verdad, quedé alucinado. No conocía apenas la obras de Sono -había visto Suicide club, pero no recordaba que fuera del mismo director-, pero desde ahora le tendré muy en cuenta.

La que comentas me la apunto. Un saludo.